miércoles, 12 de noviembre de 2008

La Catafixia del Show de los Sueños

Por razones que no vale la pena mencionar, he estado viendo los domingos El Show de los Sueños, que en estos momentos es Bailando y Cantando con mi cuate por el sueño de alguien más.

Dentro de toda la parafernalia, publicidad, falta de talento, explotación del público y ridículo, por lo menos están haciendo la vida un poco más feliz a personas que lo necesitan. No es suficiente, y Televisa podría hacer mucho más con toda la lana que tiene, pero ese no es el chiste.

Lo que me llamó la atención es la jalada que les aplican a los descalificados cada ocho días.

Al final de cada programa, un equipo queda eliminado. Esto significa que no podrá contar con la lana para realizar su sueño, que en ésta versión consiste en ayudar con la rehabilitación u operación de alguien (principalmente). Sin embargo, antes de irse los hacen pasar a un "árbol" por unas esferas, que contienen regalos sorpresa, y es ahí donde la burla comienza.

Los primeros eliminados, un cuate y su amiga, querían usar el dinero del premio para ayudar a un hospital que se especializa en operar a bebés y niños con labio leporino. Obviamente, quedaron muy desilusionados por no haberlo conseguido. Pero de consolación, Ferrero Rocher les regaló un reproductor de DVD y una colección de películas. No m...... ¿Eso para qué lo quieren?, si el chiste era ayudar al hospital. Y todavía el Adal Ramones espera que tomen los regalos con entusiasmo.

No quiero ni pensar cuando eliminen al chavo que está cantando porque necesita una operación del corazón. ¡¡No te vas a operar y te vas a morir, pero Ferrero Rocher te regala una plancha!!!

Cuando era por la boda de mis sueños sí tenían sentido esa clase de regalos, pero ahora sólo se ven mal y ridículos. Deberían ser más sensibles, y si quieren compensar a los perdedores, deberían hacer donativos para el sueño o de perdida darles un cheque con lana para ello.

No cabe duda de que el consumismo no sólo es ciego sino insensible.

lunes, 10 de noviembre de 2008

Comercial de Cerveza: entre recordar y ponerse de acuerdo

Venía hoy rumbo a la oficina y escuché en la radio un comercial de la nueva marca de cerveza que se está promocionando. Me pregunto ¿cuánta gente revisa el contenido de un comercial antes de que salga al aire?.

No lo recuerdo exactamente, pero más o menos va así:

En el anuncio se escucha a un grupo de amigos discutiendo sobre la fecha en la que suponen se va a celebrar una fiesta. - La fiesta es el Lunes 18 - afirma uno. - No, no la fiesta es el Jueves - reclama otro. - No, yo sí se - dice un tercero - la fiesta es el Domingo-.

Luego se escucha una voz que dice: "Manifiesto de los amigos: Siempre deberemos ponernos de acuerdo" (o una frase similar con la misma idea).

¿Qué acaso no es obvio que los tipos NO están intentando ponerse de acuerdo sobre cuándo se hará una fiesta, sino que están tratando de RECORDAR la fecha de en que se llevará a cabo dicha celebración?. En ese caso lo del manifiesto no viene al caso a lo que están discutiendo. Estos amigos no tienen problemas para ponerse de acuerdo, sólo tienen una pésima memoria. Y así, todo el comercial no tiene sentido.